Caballo grande, ande o no ande, pero caballo….no estufa!

La única diferencia es la potencia. Una con potencia nominal homologada de 8 Kw y la otra 12 Kw.

Ante estas dos opciones de compra, todos los clientes se inclinan por la segunda estufa.

¿Hacen bien?

Todo depende de las necesidades reales del usuario. Está calculado que la potencia necesaria para calentar 2,5 m³ (1 m² con 2,5 m de altura), en una zona climática como la nuestra y con un aislamiento medio, es de 0,1 Kw.

Dicho de otra manera, con un 1 Kw calentamos 10m², con 2 Kw, 20 m² y así sucesivamente.

Esto significa que para calentar 75-85 m² la potencia nominal homologada óptima de una estufa será de unos 8 Kw.

¿Podemos calentar estos 80 m², con una estufa de 12 Kw? ¡Obviamente, sí!, pero ¿qué pasará con la eficiencia? Para generar los 8 Kw necesarios, nuestra estufa deberá funcionar con una carga de leña limitada y con una regulación que no será la óptima.

Resultado: mayor consumo, mayor polución, suciedad en el cristal y en conducto de humos.

Conclusión: En este caso el Refranero nos ha engañado.

Para conseguir el mejor rendimiento, combustión más limpia y mínima polución, es imprescindible dimensionar nuestra estufa adecuadamente. Tan grave es elegir un aparato con potencia insuficiente como uno sobre dimensionado.

¡Caballo grande, ande o no ande, pero caballo….no estufa!!!!!